Causas principales que dañan el hígado

Debemos seguir estos consejos sin que signifique mayor gasto o uso excesivo del tiempo. Solo tenemos que adoptar un estilo de vida más sano y mejorar nuestros hábitos alimentarios. Otro factor que debemos tener en cuenta es la hidratación continua. Muchas veces por descuido no ingerimos la cantidad de agua que requiere el cuerpo para apoyar los procesos de digestión y limpieza del organismo.

Muchos de los procesos de depuración dependen de la cantidad de líquido para ser más eficientes. Por ejemplo, mediante la orina y el sudor se eliminan muchos elementos químicos que no aportan a la salud del cuerpo. Su permanencia prolongada en el organismo puede causar daños a la salud.

Mantener buenos hábitos de alimentación y hacer ejercicios es muy positivo para que nuestro organismo absorba lo que necesita y elimine los químicos en su "horario" de recuperación.
  • No orinar por la mañana - No tener la vejiga llena es por sí es una mala señal que apunta a problemas en los riñones. Por otro lado, no se debe aguantar el deseo de orinar.
  • Dormirse tarde y despertarse tarde - Durante las horas de sueño los órganos y la mente se sanan y se fortalecen. Los procesos de la digestión y la fijación del conocimiento en la memoria ocurren durante el sueño. Muy poco o demasiado puede traer problemas de salud a largo plazo. 
  • Comer demasiado - El exceso de comida causa estrés al sistema digestivo, especialmente cuando no se mastican bien los alimentos. Si se hace con frecuencia, terminará dañando uno o varios de los órganos del sistema digestivo.
  • Saltarse el desayuno - Esta mala costumbre suele ser la causa de desbalances nutritivos, especialmente con el metabolismo de los azúcares. 
  • Tomar muchos medicamentos - Consulta con tu médico sobre los efectos secundarios y qué puedes hacer para que no se conviertan en otros problemas de salud. Como medida de precaución ingiere mucha agua y otros líquidos. No tomes las medicinas en ayunas, excepto que sea recomendado por el doctor. 
  • Consumir preservativos, colorantes y endulzantes artificiales
  • Consumir aceites de cocina no saludables - Tanto como puedas reduce el consumo de alimentos fritos, aunque utilices aceites sanos. No consumas alimentos fritos cuando estés cansado o enfermo a menos que seas muy delgado, pero si puedes, evítalos.
  • Consumir alimentos crudos o demasiado cocidos le agregan carga al hígado - Los vegetales pueden comerse crudos o cocidos al vapor para que conserven todos los nutrientes.
Recuerda que una onza de prevención es mejor que una libra de remedios.

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